Hermosillo Sonora
a 4 de enero del 2013.
Por: Prof. Gerardo Castro Ruiz.
Secretario de Proyecciones Salariales.
Del Comité Ejecutivo de la Secc. 28 del
SNTE.
Se dijo que Elba Esther
Gordillo Morales, Presidenta del Consejo General Sindical para el Fortalecimiento
de la Educación Pública del SNTE, se
reunió con el Presidente Enrique Peña Nieto el pasado 7 de diciembre y que el
encuentro versó sobre la iniciativa de Reforma Educativa a la cual Elba Esther
no se opuso (Así se dijo).
Días más tarde, el 10
de diciembre fue presentada la iniciativa y al día siguiente el profesor Juan
Díaz De la Torre, Secretario General del
Comité Ejecutivo Nacional anunciaba el posicionamiento del SNTE en apoyo
a dicha iniciativa entre otros puntos muy importantes. Puedes leer el
posicionamiento completo en http://www.snteceapson.composicionamiento/
Sin embargo Elba Esther
no asistió a la presentación de dicha Iniciativa y en el marco de su discusión
y aprobación en el Congreso de la Unión, convocó a la XXXV Sesión
Extraordinaria del Consejo Nacional.
Ahí se construyó un
pronunciamiento en rechazo a algunos términos de la Reforma que ponen en riesgo
la certidumbre laboral del gremio magisterial, específicamente en los puntos
siguientes: 5.- Con relación a la
reforma particular sobre el servicio profesional y la permanencia de los
maestros en el servicio docente, acordamos expresar de manera transparente que
el SNTE no puede respaldar una medida que amenaza la estabilidad laboral y que
genera incertidumbre en el empleo; 7.- Los trabajadores de la educación,
reiteramos nuestro respaldo a una reforma educativa que responda al interés de
la Nación y al de todos los mexicanos, y que supere el conjunto de desafíos
educativos, sin que ello se convierta en amenaza ni agravio para las maestras y
maestros; y 9.- El SNTE reitera su
inconformidad con la aprobación de una disposición que amenaza la estabilidad
laboral y la seguridad en el empleo. Leer el pronunciamiento completo en http://www.snteceapson.com/pronunciamiento
Entonces… ¿Qué pasó
realmente? ¿Por qué primero sí a la Reforma y después que no? No sabemos en qué
términos abordaron Elba Esther y Peña Nieto ese tema en aquella reunión. No
sabemos si Peña prometió dar el tiempo necesario para recibir la opinión y la
participación del gremio en la elaboración de la Iniciativa, pero lo que sí
sabemos es que resultó ser un madruguete. No nos escucharon.
Tampoco sabemos si Elba
le pidió en esa misma reunión quitar el término “Permanencia” de la iniciativa
que presentaría (http://pactopormexico.org/Reforma-Educativa.pdf)
y este no cumplió, pero lo que sí es cierto es que en el marco de su discusión,
el SNTE exigió eliminar ese término de la reforma al artículo tercero
Constitucional sobre la evaluación de los maestros, pero no lo logró.
El texto decía:
"La Ley reglamentaria fijará los criterios, los términos y condiciones de
la evaluación obligatoria para el ingreso, la promoción, el reconocimiento y la
permanencia en el servicio
profesional”.
No solamente no la
eliminaron, sino que agregaron “con pleno respeto a los derechos
constitucionales de los trabajadores de la educación" para quedar así: "La
Ley reglamentaria fijará los criterios, los términos y condiciones de la
evaluación obligatoria para el ingreso, la promoción, el reconocimiento y la permanencia en el servicio
profesional” con pleno respeto a los
derechos constitucionales de los trabajadores de la educación".
He ahí una de las
razones por las cuales la dirigencia nacional hizo el pronunciamiento citado en
oposición a esta reforma, pues de esa manera se genera la incertidumbre laboral
en nuestro gremio.
Todos sabemos que en el
obsoleto Reglamento de las Condiciones Generales de Trabajo del Personal de la
SEP (http://www.snte28.org.mx/reglamento)
están establecidos derechos y obligaciones, entre lo cual se incluyen la
justificaciones de despido. Entonces, si el despido está justificado en la Ley,
al aplicarla el patrón no viola un derecho constitucional del trabajador, sino
que procede ante una falta del
trabajador en el cumplimiento de sus obligaciones o lo que es lo mismo, en una
falta legal.
Desde ese punto
de vista, si el resultado de la evaluación universal obligatoria es una
justificación para la permanencia o no en el trabajo, en esas condiciones no se
violentaría ningún derecho Constitucional. Aquí es donde los asesores jurídicos
del SNTE deberán revisar los recovecos de la Ley, hacer las precisiones de sus
efectos y las recomendaciones correspondientes.
Una de las
muchas incongruencias de la Reforma Educativa es precisamente que contiene una equívoca concepción del
significado de una evaluación y su propósito, de tal forma que en lugar de
usarlo como un instrumento para mejorar lo utilizarían para castigar.
Otra de las
incongruencias es que en la exposición de motivos reconocen que sería injusto señalar que los bajos
resultados educativos obedecen a un sólo factor como frecuentemente se ha
señalado de manera equivocada, pero en la legislación solo dirigieron los
cambios –amenazadores- hacia el maestro; es una Reforma que prácticamente lo acusa
de nuevo del estado educativo, una reforma que no apunta a la atención y
solución de muchos factores que influyen importantemente en la calidad de la
educación.
Todo eso sugiere
que lo que menos importa es mejorar el sistema educativo y el objetivo real se
deba a un revanchismo político, a la vez que a una estrategia para llevar a los
maestros a contratos eventuales o plazas limitadas.
Esta medida
educativa es una respuesta a modo para la clase empresarial que se ha
convertido en inquisidores del gremio y de la educación pública para convertir
a esta en uno más de sus negocios, una respuesta a la clase política que ven a
Elba como su enemiga y una respuesta específicamente popular porque gran parte
de la sociedad ha sido susceptible a la campaña negra contra el magisterio, e
ingenuamente la sociedad cree que la Reforma que se aprobó es la panacea para
una mejor educación. Ni modo, nuestras estrategias han sido demasiado débiles
ante la contundencia de la calumnia de Mexicanos Primero.
Con estas
modificaciones a la Ley, sin duda -PRI-PAN-PRD- ganan popularidad, quedan bien
con empresarios, con políticos y con la sociedad, menos con los maestros
(aunque seamos muchos, somos los menos). Por la forma en que se modificó el
Artículo 3° Constitucional claramente responsabilizan de nuevo al maestro y
también es claro que esta reforma no es congruente con las verdaderas y
urgentes necesidades del sistema educativo.
Si en la
exposición de motivos se reconoce la diversidad de factores que influyen en la
calidad educativa como la responsabilidad de los poderes públicos, órganos de
gobierno, instituciones, organizaciones gremiales, expertos, docentes,
educandos, padres de familia, autoridades y la sociedad en su conjunto.
Si también se
reconoce la influencia de las asesorías académicas, espacios, infraestructura,
estructuras orgánicas, planes, programas, métodos, textos, materiales, procesos
específicos y financiamiento. Factores sociales, culturales y económicos, es
decir, las dificultades del entorno y las condiciones de la escuela en la que
el maestro se desempeña. ¿Por qué entonces la Reforma se concentró
exclusivamente en los maestros?
La Reforma está
basada solo en dos ejes que tienen que ver con los docentes frente a grupo, y
quienes desempeñan la función de dirección y supervisión: El servicio
profesional docente y el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación ¿Y
todos los demás factores que se reconocieron por qué no los reglamentaron?
Ciertamente en
ella están contempladas algunas de las propuestas del SNTE como Escuelas de Tiempo
Completo, la formación continua de los maestros, la autonomía de la gestión
escolar, cambiar los productos chatarra en las tiendas escolares por los
nutritivos. Propuestas que fueron incluidas en el articulado transitorio de la
Reforma.
También hacía
años que se insistía en que la educación fuese una política de estado para que
sus efectos fuesen más allá de los sexenios y del capricho o de la ocurrencia
de un presidente o de un partido político en el poder, y para ello, la única
vía es por decreto. Pero desafortunadamente la Reforma no fue de gran calado como se
exigía, resultó muy limitada y amenazadora contra la paz laboral.
Otra de las
propuestas fue establecer de manera legal y con autonomía al Instituto Nacional
para la Evaluación de la Educación. Pero la propuesta del SNTE no se limita a
un examen universal, sino a una evaluación integral al sistema educativo, a
todos sus actores y factores, pero siempre encaminada a descubrir las áreas de
oportunidad para desarrollarlas y/o fortalecerlas, para ser cada vez mejores,
no para transgredir la paz laboral.
Una evaluación
universal integral incluye a los funcionarios quienes deben de ser sometidos
primero a exámenes de oposición para que lleguen a administrar la educación
solo los mejores, que cuenten con un perfil idóneo y a exámenes posteriores
para ver su desempeño -ahora tenemos a Emilio Chuayffet como Secretario de Educación
Pública- ¿Cuáles son sus méritos? ¿Tiene licenciaturas, maestrías o doctorados
en educación? ¿Fue exitosa su administración de la educación en el Estado de
México? ¿Presentó examen de oposición para ocupar ese cargo? ¿Quiénes de sus
subsecretarios presentaron examen? Pues esto ni lo tocó la Reforma Educativa.
Los concursos de oposición serán solo entre maestros para ocupar las plazas
docentes, las directivas y las de supervisión (Servicio Profesional Docente).
La evaluación
universal también tiene que revisar las necesidades de todo el sistema
educativo y analizar si el presupuesto que se destina a este rubro es
suficiente para resolverlas. Si sabemos que la Ley obliga al ejecutivo federal
a destinar el 8% del Producto Interno Bruto y este destina apenas por encima
del 4% quiere decir que el primero en quebrantar la Ley es el propio gobierno.
¿Y cuando esto sucede y se reincide quién sanciona al Ejecutivo, a los
diputados y a los senadores?
Todo eso nos dice que
la legislación reciente en materia educativa es pobre e injusta. Es por ello
que el SNTE no debe ni puede aprobarla en esas condiciones.
¿Qué sigue?
Casi al final del pronunciamiento
acordado en la XXXV Sesión extraordinaria del Consejo Nacional expresa “Somos
una organización sindical respetuosa de nuestro marco constitucional, pero nos
reservamos el derecho a ejercer todos los recursos legales, sociales, políticos
y pacíficos a nuestro alcance con el propósito de garantizar el pleno respeto
al empleo y a la dignidad de los trabajadores de la educación”
Es por ello que otro de
los acuerdos emanados fue realizar la Jornada Nacional de Defensa de la Escuela
Pública, con acciones pacíficas en todo el territorio nacional. Dichas acciones
se realizarán los sábados y domingos y
consistirán en informar a la sociedad sobre los alcances de esta reforma y del
riesgo laboral, en el marco de eventos artísticos, culturales, deportivos, a
los cuales se invitará a que participen los padres de familia y a la sociedad
en general.
Eso por el lado del
SNTE, mientras que por el lado del poder legislativo, la Reforma aprobada por
el Congreso de la Unión deberá ser puesta a consideración de los 31 Congresos
Locales y de la Asamblea Legislativa del D.F. y deberá ser aprobada por la
mitad más uno.
Pero bueno, según se ve
no se podrá hacer mucho en las legislaturas locales. Hasta el momento de
escribir este artículo ya había sido aprobada en Chiapas, Baja California,
Coahuila y Aguascalientes.
Aunque en el caso de
Sonora, los diputados azules deben estar comprometidos con la causa
magisterial, debido a la alianza que se creó en el proceso electoral pasado, y
a que los diputados de Nueva Alianza los acompañaron votando a favor de la
cuestionada Ley de ingresos del presente año. Así que los diputados del PAN
deben solidarizarse ahora con los Neo-aliancistas para dar marcha atrás a la
Reforma enviada por el Congreso de la Unión. Ya veremos.
La movilización que
viene, anunciada desde el Consejo Nacional del SNTE es importante y requiere de
la Unidad para que esta tome la fuerza que necesita una exigencia de esta
naturaleza.
Debido a que la
credibilidad en los liderazgos se ha debilitado, posiblemente se encuentren
desconfianzas entre los trabajadores sobre el propósito de esta convocatoria y se
tornará más difícil lograr la concientización mayoritaria de unirse a la
exigencia por mejorar las condiciones laborales del magisterio y por una Reforma
Educativa que esencialmente atienda y resuelva las necesidades reales del
sistema educativo mexicano. Habrá que trabajar más.
Pero no hay opción para
dirigentes y representados, solo la fuerza que da la unidad puede hacer el
milagro de sensibilizar a la clase política y reivindicar el camino por la
profesionalización magisterial y una educación pública de calidad sin menoscabo
de las garantías laborales. La dirigencia debe encabezar esta exigencia como
único objetivo, haciendo de lado toda posibilidad de negociar a la vez cargos
en el gobierno federal, eso no sería saludable, el magisterio nacional no lo
vería para nada bien y desvirtuaría la autenticidad de esta lucha.